Síntomas del cáncer de hígado
El de hígado es un cáncer relativamente raro, pero muy agresivo. Más comunes son las metástasis hepáticas de tumores que se han desarrollado en otros lugares (como el colon, los pulmones y la mama).
La alta tasa de mortalidad está ligada a la ausencia generalizada de síntomas en las etapas iniciales (no en vano, se le conoce como tumor silencioso), y a la ineficacia de los tratamientos (sin embargo capaces de mejorar la calidad de vida). La buena noticia es que el cáncer de hígado se puede prevenir limitando el consumo de alcohol y evitando las relaciones sexuales sin protección con personas en riesgo.
En las primeras etapas la mayoría de las personas no desarrollan signos y síntomas de la enfermedad; esto significa que el diagnóstico temprano es muy raro para el cáncer de hígado. Cuando aparecen los síntomas, incluyen los enumerados anteriormente.
Síntomas y signos más comunes
El problema es que el cáncer de hígado no presenta síntomas en las primeras etapas, razón por la cual también se le ha llamado cáncer silencioso.
A medida que avanza la enfermedad aparecen los primeros síntomas como dolor en la parte superior del abdomen, que también puede irradiarse a la espalda y los hombros, agrandamiento del vientre, pérdida de peso y apetito, náuseas, vómitos, sensación de saciedad, agotamiento, ictericia (es decir, el color amarillo de la piel), coloración oscura de la orina y fiebre. La ictericia se debe al hecho de que se acumulan concentraciones significativas de bilirrubina en la sangre, cuando una gran parte del hígado se ve afectada por el tumor o cuando el conducto biliar está bloqueado.
A veces hay un bazo agrandado, especialmente si el cáncer de hígado es secundario a un tumor que se origina en el páncreas.
Muchas personas se quejan de hinchazón localizada en la cavidad abdominal o extremidades inferiores, por ejemplo pies hinchados, pero estos son síntomas generales de enfermedad hepática, no necesariamente cáncer. Otro síntoma es la ascitis, la presencia de líquido libre en el abdomen, causado por la producción reducida del hígado de una proteína particular llamada ‘albúmina’.
Cuando la albúmina en la sangre es demasiado baja, parte del agua que forma la sangre se filtra al abdomen.
En general, los síntomas iniciales mencionados son bastante comunes, lo que también puede indicar otras enfermedades. En caso de duda, es aconsejable consultar con su médico, quien le recomendará las pruebas más adecuadas.