Señales de advertencia del carcinoma epidermoide
Cuando se detecta de inmediato, casi todos los carcinomas de células escamosas (SCC) de la piel pueden tratarse con éxito. Pero cuando se vuelven más avanzados, estos cánceres de piel pueden volverse peligrosos.
Por eso es importante estar atento a cualquier signo de advertencia, incluidos crecimientos de piel nuevos, cambiantes o inusuales.
Cómo detectar un carcinoma epidermoide
Puede desarrollarse en cualquier parte del cuerpo, pero se encuentra con mayor frecuencia en áreas expuestas a radiación ultravioleta (UV) como la cara, labios, orejas, cuero cabelludo, hombros, cuello, dorso de las manos y antebrazos. Los carcinoma epidermoide pueden desarrollarse en cicatrices, llagas en la piel y otras áreas de lesiones cutáneas. La piel que los rodea generalmente muestra signos de daño solar, como arrugas, cambios de pigmento y pérdida de elasticidad.
Qué puede hacer
Examínese de la cabeza a los pies una vez al mes: esté atento a las lesiones nuevas o cambiantes que crezcan, sangren o no cicatricen.
En caso de duda, comprobar que funciona. Siga sus instintos y visite a su médico si ve un lugar que simplemente no parece correcto.
Consulte a su dermatólogo para un examen profesional de la piel todos los años, incluso si no ve nada sospechoso. Estos especialistas están capacitados para identificar y tratar crecimientos anormales de la piel que pueden ser indetectables para el ojo inexperto y pueden revisar áreas de su cuerpo que son difíciles de ver por sí mismo.
Realice un seguimiento con regularidad: especialmente si ya ha tenido SCC o carcinoma de células basales (BCC), melanoma o precánceres como la queratosis actínica, asegúrese de consultar a su dermatólogo para un examen de la piel a los intervalos recomendados.
Practique la seguridad solar: Hacer que la protección solar diaria sea parte de su estilo de vida es la forma más eficaz de reducir el riesgo de desarrollar cáncer de piel.
