Opciones de tratamiento del cáncer de mama: cirugía de reconstrucción mamaria
Enfrentar el cáncer de mama es un camino lleno de decisiones difíciles, y la reconstrucción mamaria es una de las más personales. No solo se trata de la recuperación física, sino también de la emocional. Sentirse bien en tu propio cuerpo puede ser un paso importante hacia la sanación. Si estás considerando la reconstrucción mamaria, aquí te ofrecemos una guía sobre las diferentes opciones para que, junto con tu equipo médico, puedas tomar la mejor decisión para ti.
Tipos de procedimientos de reconstrucción mamaria
Reconstrucción con colgajo (autóloga)
En este tipo de reconstrucción se utiliza tejido de otras partes de tu cuerpo, como del abdomen, espalda o muslo, para recrear la mama. Al tratarse de tu propio tejido, el resultado puede ser más natural en cuanto a apariencia y sensación. Sin embargo, es una cirugía más compleja que requiere un mayor tiempo de recuperación. Si bien puede sonar intimidante, para muchas personas la idea de usar su propio tejido, y no un implante, les brinda mayor tranquilidad a largo plazo.
Reconstrucción con implante
Este procedimiento utiliza un implante de silicona o solución salina para recrear la forma de la mama. Es menos invasivo que la reconstrucción con colgajo, lo que significa que el tiempo de cirugía y recuperación es más corto. Los implantes pueden colocarse debajo o sobre el músculo del pecho, dependiendo de lo que el cirujano considere mejor para ti. Aunque es una opción menos compleja, los implantes pueden necesitar reemplazo con el tiempo, algo a tener en cuenta a largo plazo.
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¿Cómo elegir entre el colgajo y el implante?
Cada opción tiene sus pros y contras, y lo que puede ser adecuado para una persona quizás no lo sea para otra. Con el colgajo, tienes una solución más natural, pero con un proceso de recuperación más largo. Con los implantes, la cirugía es más sencilla, pero puede haber complicaciones o la necesidad de revisiones futuras. La clave es tomarte el tiempo para analizar lo que es mejor para ti, tanto física como emocionalmente.
¿Por qué considerar la reconstrucción mamaria?
La reconstrucción mamaria no es solo una cuestión estética. Para muchas personas, es parte de su recuperación emocional, una manera de sentirse completas nuevamente. Algunas razones por las que podrías considerar esta cirugía incluyen:
- Simetría: Lograr que la mama reconstruida tenga un tamaño y forma similar a la otra mama.
- Corrección de deformidades: Unificar huecos o bultos que puedan haber quedado después de la mastectomía.
- Reconstrucción del pezón y la areola: Si se extirpó durante la cirugía, existen opciones para reconstruir esta área o incluso tatuarla, si prefieres evitar más cirugías.
Lo importante es recordar que no hay una respuesta correcta o incorrecta. Algunas personas optan por la reconstrucción de inmediato, mientras que otras prefieren esperar o incluso no hacerlo. Hablar con tu cirujano y, si es posible, con otras personas que hayan pasado por este proceso, puede darte una perspectiva más amplia y ayudarte a tomar la mejor decisión para ti.
Otras opciones de cirugía
Cirugía de la otra mama
A veces, después de la reconstrucción, la mama nueva no coincide exactamente con la otra. En estos casos, el cirujano podría recomendar hacer un ajuste en la mama no afectada para equilibrar la apariencia, ya sea mediante una reducción, aumento o levantamiento.
Reconstrucción mamaria después de una lumpectomía
Si tu tratamiento incluyó una lumpectomía, es posible que al principio te sientas bien con los resultados, pero con el tiempo, y especialmente después de la radioterapia, la forma de la mama puede cambiar. Si esto sucede, la reconstrucción puede ayudarte a restaurar la simetría y la confianza.
Lumpectomía oncoplástica
Esta opción combina técnicas de cirugía plástica con la lumpectomía, permitiendo obtener mejores resultados estéticos después de la extirpación del tumor. Es una buena opción si buscas mantener la mayor cantidad de tejido mamario posible, pero también quieres lograr un resultado estético más armonioso.
Tatuajes y reconstrucción del pezón
Perder el pezón y la areola puede ser un impacto emocional fuerte, pero existen opciones para recrearlo. Puedes optar por una cirugía reconstructiva o, si prefieres evitar más operaciones, algunos tatuadores especializados pueden crear un tatuaje que imite el aspecto del pezón de forma sorprendentemente realista.
Extracción de implantes (explante)
Algunas personas deciden, con el tiempo, que ya no desean tener los implantes. Los motivos pueden ser variados: cambios de salud, complicaciones o simplemente un cambio en tus preferencias personales. La cirugía de explante es una opción para quienes desean retirar los implantes y, en algunos casos, optar por una nueva forma de reconstrucción o dejar el pecho plano.
Si estás considerando la reconstrucción mamaria, tómate el tiempo que necesites para explorar todas las opciones, hablar con especialistas y, sobre todo, escuchar tus propios sentimientos. No hay una decisión correcta que se aplique a todas. Lo más importante es que te sientas cómoda con tu elección y que se adapte a tus necesidades físicas y emocionales.
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