Nutrición durante el tratamiento para el mieloma
Una nutrición adecuada y saludable puede ayudar a las personas con mieloma múltiple a controlar mejor la enfermedad. La patología y la quimioterapia a menudo afectan el apetito del paciente, pero al intentar cambiar el número de comidas al día, por ejemplo, aumentando su frecuencia y disminuyendo la cantidad de comida, se puede intentar contrarrestar las náuseas.
Los horarios también son importantes: en las primeras horas de la mañana es más fácil poder comer. Durante el día, entonces, se recomienda tener a mano algunos bocadillos ligeros para consumir, para seguir manteniendo la energía en el cuerpo y no abrumarse por la fatiga.
En cuanto al tipo de alimentación recomendada, se debe plantear una visita al dietista que, junto con su médico, podrá recomendar alimentos adecuados.
Por lo general, las personas con cáncer de sangre también padecen anemia. La falta de glóbulos rojos provoca fatiga, debilidad y sensación de frío. La ingesta de alimentos ricos en hierro, como carnes rojas magras, batatas, brócoli, pimientos y frutas tropicales como mango, papaya o piña, puede ayudar.
Mayor producción de proteínas
El mieloma múltiple también genera problemas en los riñones porque el tumor no solo conduce a una mayor producción de proteínas sino que, al atacar los huesos, libera calcio a la sangre. Por estas razones, los dos órganos tendrán que trabajar más duro, esforzándose y arriesgándose a sufrir daños.
Por tanto, puede resultar necesaria una dieta para protegerlos. En primer lugar, la reducción de sal, alcohol, alimentos ricos en proteínas, calcio y potasio puede resultar beneficiosa. También deberá prestar atención a la cantidad de líquidos que consume, ya que los riñones muy dañados no pueden soportar grandes cantidades de agua y otras bebidas.
Otro problema puede ser el aumento del riesgo de infección, debido al hecho de que el sistema inmunológico está comprometido no solo por el tumor sino también por la quimioterapia. Evite comer alimentos crudos, como huevos, sushi y carne, que pueden ser peligrosos incluso si está perfectamente sano. Simplemente cocinando a temperaturas mínimas para matar virus y bacterias. Las frutas y verduras sin lavar o peladas también pueden representar un riesgo.
Por otro lado, algunos alimentos con alto contenido de fibra pueden ayudar a contrarrestar el estreñimiento debido a la ingesta de medicamentos de quimioterapia. Entre estos se encuentran la avena, el arroz, pero también frutos secos como pasas, higos, albaricoques y ciruelas. Se pueden agregar a la dieta manzanas, peras, naranjas, bayas y nueces. Los frijoles, las lentejas y las verduras como el brócoli, las zanahorias y las alcachofas también tienen un alto contenido de fibra.
Por último, un alimento bien condimentado puede no ser necesariamente un problema para las personas con cáncer de sangre: un estudio ha demostrado que la curcumina, un extracto de cúrcuma, reduce el riesgo de ser resistente a ciertos medicamentos utilizados en la quimioterapia.