Mielodisplasia: síntomas, causas y tratamientos
La mielodisplasia es una condición que se presenta cuando hay un defecto dentro de la médula ósea que resulta en una disminución de las células de la sangre. La médula ósea es la encargada de fabricar todas las células de la sangre: hemoglobina, glóbulos rojos y glóbulos blancos.
A consecuencia de esta anomalía en las células de la sangre los pacientes pueden presentar manifestaciones clínicas como cansancio, fatiga, infecciones y sangrados.
De acuerdo a las células que se vean afectadas, las manifestaciones clínicas pueden cambiar. Por ejemplo, la doctora Mayra Rivera, hematóloga oncóloga, explica en entrevista exclusiva con BeHealth:
«Si las células que se ven afectadas por esta enfermedad son los glóbulos blancos el paciente va a tener riesgo de desarrollar mayor número de infecciones. En el caso de que se vea afectada la hemoglobina, conocido como la célula roja, encargada de llevar el oxígeno a las diferentes partes del cuerpo, la disminución en estas células va a resultar en síntomas como cansancio, fatiga, dolor de pecho, incluso en infartos».
En caso de que las células afectadas sean las plaquetas, encargadas de la coagulación, la manifestación clínica puede ser el sangrado gastrointestinal, sangrado a través del sistema genitourinario (orina o evacuaciones con sangre) y moretones en la piel.
Signos de alarma
Un paciente con infecciones repetitivas o mayores de 70 años son más propensos a desarrollar esta enfermedad. Sin embargo, también puede presentarse en pacientes menores de 50, usualmente si han recibido tratamiento de quimioterapia.
Entre los principales síntomas que debe tener el paciente para mencionar a su médico primario y llegar a un diagnostico son:
- Anemia o disminución de la hemoglobina
- Infecciones frecuentes
- Glóbulos bajos o aumentados
La doctora Rivera hace hincapié en que los pacientes deben exigir una razón de porqué se presentan este tipo de manifestaciones clínicas, ya que la anemia en sí misma o las infecciones frecuentes no son un diagnóstico, son una manifestación que indica que algo está pasando.
Factores de riesgo
En pacientes jóvenes el principal factor de riesgo es la quimioterapia y en pacientes mayores se relaciona con la edad. Por ende, de acuerdo con Rivera, no hay formas de prevención.
Métodos de diagnostico
Para el diagnóstico se recurre a laboratorios de rutina, una citogenética que permite identificar cambios en los genes que pueden producir este tipo de condición y finalmente un análisis de la médula ósea que dará el dictamen definitivo de mielodisplasia, ya que en este último se pueden detectar los cambios que pueden existir en los componentes de las células madre.
A través de estos análisis se obtienen “unos pronósticos que permite clasificar si es de alto riesgo, intermedio o bajo y de acuerdo a esta clasificación se determina qué tratamiento se utilizará con el paciente», afirma Rivera.
Tratamientos y prevención de la leucemia
Un paciente con mielodisplasia tiene mayor riesgo de desarrollar una leucemia aguda, una condición con alta tasa de mortalidad principalmente en pacientes mayores. El desarrollo de la leucemia aguda depende en gran medida de las condiciones físicas y la edad de la persona, entre más edad mayor riesgo de desarrollarla.
Sin embargo, como lo menciona la doctora Mayra Rivera, a estos pacientes de les trata con diferentes métodos para evitar llegar al desarrollo de este cáncer. Entre los tratamientos utilizados se encuentran las quimioterapias por vena y medicamentos por boca y el trasplante de médula ósea, este último especialmente para los casos en que el paciente no responde a los tratamientos convencionales.
A través de la combinación de medicamentos se busca que el paciente tenga una mejor calidad de vida, ya que es una condición que no tiene cura.